El masaje es una de las técnicas básicas dentro de la fisioterapia. También en el sector de la estética, existen diversos tipos de masajes para reducir, drenar o reafirmar.
Aunque puede realizarse en seco, la práctica habitual se ayuda de cremas y aceites de masaje específicos. ¿Sabes en qué consiste cada uno y cuándo utilizarlos?
La crema de masaje
Se trata de un producto oleoso que se presenta en estado fluido con mayor o menor densidad. Cumple varias funciones:
- Permitir que las manos del profesional – fisioterapeuta o esteticista – se deslicen con suavidad y fluidez sobre la piel del paciente. Incluso, en pieles con pelos.
- Protege la piel. En masajes prolongados la constante fricción en un punto concreto puede llegar a dar lugar a abrasiones. La crema de masaje crea una película que protege la epidermis, pero no impide el paso de la presión.
- Aportar efectos extra, como el calentamiento o el enfriamiento muscular
Tipos de crema de masaje
Según los efectos que causan o el tipo de masaje que se vaya a realizar, el fisioterapeuta seleccionará un tipo determinado de crema de masaje u otro. Podemos distinguir 4 grandes grupos:
- Crema de masaje con
efecto calor . Este tipo de masaje busca aumentar la viscosidad de las fibras musculares para proceder a su movilización. Es habitual en el tratamiento de lesiones. También puede acelerar la lipólisis o quema de grasas localizadas, algo muy deseado en el tratamiento de cartucheras o celulitis.
- Crema de masaje con efecto frío. Reduce la temperatura local. Actúa como relajante muscular y activador de la circulación. Es habitual para piernas cansadas o problemas de varices. También para el drenaje linfático y el masaje flexodinámico, antes de aplicar vendas frías.
- Cremas de masaje recuperador. Se usan tras el ejercicio físico para reducir el dolor y los posibles hematomas. Entre los ingredientes que no suelen faltar encontramos árnica, hipérico y caléndula.
- Cremas de masaje hidratante. El objetivo del masaje, en este caso, es simplemente mejorar el aspecto de la piel. Se aplican con masajes más superficiales, menos intensos y más placenteros.
Aceites de masaje
El aceite de masaje, a diferencia de la crema de masaje, no tiene más función terapéutica que la de permitir el deslizamiento fácil, suave y fluido de las manos del terapeuta sobre la piel del paciente.
De esta forma, se evitan tirones o parones que podrían dificultar el amasamiento muscular. Podemos encontrar aceite de masaje en 2 formatos:
- Aceite de masaje convencional. Muy líquido, inodoro y fácil de limpiar con agua una vez acabado el masaje. No dejan sensación pegajosa.
- Aceite de masaje sólido. Suena contradictorio, pero se puede presentar en forma de mantecas de rápida absorción.
No deben confundirse los aceites de masaje específicos para masaje con los masajes con aceites esenciales. En este caso, se trata de productos de origen botánico, en concentraciones determinadas y con diferentes efectos según su composición. Suelen, además, aportar propiedades de aromaterapia.
Por último y a modo de conclusión, en Vialta tenemos un amplio catálogo con cremas y aceites de masaje. Si eres fisioterapeuta o esteticista, ¡entra a conocerlos!